Para San José la reestructuración no será nada fácil el próximo año

 Tras la pérdida de categoría a causa de las deudas, a San José no le queda mirar al frente con una posición analítica y dar los pasos corrector para tratar de cambiar la debacle en la cual se encuentra, algo que no será nada sencillo ya que en primer lugar deberá volver al seno de la AFO y para ello también se deben pagar algunas deudas pendientes.

San José terminó de la peor forma el torneo 2021 y su segundo ciclo en la División Profesional, con la pérdida de categoría y una serie de deudas que siguen y suman, el cuadro “santo” licenció a sus jugadores bajo el temor que muchos de ellos no volverán la próxima gestión debido a la crisis institucional.

San José debe tomarse una pausa y pensar con claridad meridiana que hará en el 2022 en lo que ya los socios denominaron como “operación retorno”, plan que se maneja de forma hermética por parte de quienes aún dirigen a la entidad.

El proceso de sanear al club no será nada sencillo y muchos ya han mencionado que el mejor camino es dejar descansar al equipo principal y con ello todas sus deudas, algo que aún tiene detractores que señalan que junto a ellos se perderá toda la historia del club, aunque otros difieren en este criterio pues señalan que grandes clubes pasaron por esta transformación y ahora tienen un panorama promisorio.

San José debe pensar cómo afrontará el torneo local y con qué jugadores, ya que sobre el club aún pesa varias deudas que han derivado en sanciones que seguirán vigentes a pesar de ser un club asociacionista.

A esto se suma regularizar algunas deudas pendientes que se tiene con la Asociación de Fútbol Oruro (AFO) lo cual se aproxima a los 80 mil bolivianos producto de diversas acciones no pagadas del equipo que se tiene en la Primera “A” y las divisiones inferiores.

El otro hecho es que se debe cambiar el nombre del equipo que actualmente se tiene en la primera división local, que este año no participó del torneo local, es decir, que para el 2022 el cuadro orureño tendrá dos clubes en la categoría privilegiada de la AFO y por normativa nacional no pueden existir dos elencos con el mismo nombre.

Quizá el tema de la aparición de un nuevo club puede ser la solución, pero es algo que aún está lejos de materializarse y donde se necesita pasar por muchas etapas, de todas formas son algunas soluciones que deben ser encaminadas por la masa societaria en bien del cuadro de la “V” azulada.