El 26 de julio del 2018, es la fecha que quedará en el recuerdo de la familia Careaga. Jesús, con 21 años, debutó en las filas de San José y lo hizo con una victoria ante Bolívar, por 3-2, en la segunda fecha, del torneo Clausura.
Jesús se puso a llorar inconsolablemente, mientras sus compañeros lo felicitaban por el debut que tuvo en el arco del equipo de sus amores. Lo que nadie sabía era que había cumplido con la promesa que le hizo a su padre Iván, quien estaba en la gradería y tampoco pudo contener sus lágrimas.
"Un día van a gritar nuestro apellido en la gradería", le dijo Jesús a su padre cuando era un niño e iba a la gradería del estadio Jesús Bermúdez para apoyar al club San José.
Un día antes del debut, el entrenador Eduardo Villegas le confirmó a Jesús que iba a jugar. Lo tan anhelado llegaba, tanto años de trabajo tuvo su premio, poder ser parte de un partido profesional.
"En la noche fue complicado dormir, porque tenía muchos años de trabajo, la gente en Oruro es exigente, en el transcurso del día del partido me hablaron los compañeros para que tenga mucha mayor confianza", comentó Jesús.
El chico orureño que estuvo en la escuelita del club Americano, luego pasó a Oruro Royal, donde debutó a los 15 años en la Copa Simón Bolívar tenía su oportunidad en San José, tras cuatro años de haber sido tercer y segundo arquero.
La infancia de Jesús no fue fácil, al año y medio de nacido fue abandonado por su madre. Iván con todo el amor de padre sacó adelante a su hijo con el apoyo de la abuela.
"Mi papá estaba más nervioso que yo, mi abuela estaba en Santa Cruz y no pudo ir al estadio, pero me llamó y se puso a llorar. Los dos lo vivieron muy intensamente".
Jesús recordó que en el ingreso al campo de juego escuchó el aliento de más de 15.000 personas que estaban con la expectativa de una victoria del "Santo".
"Fue algo mágico, desde que entré a la cancha, era un sueño cumplido y estaba emocionado. Había mucha presión detrás mío, porque de no haberlo hecho bien, quizás estaba fuera de San José, porque había mucha gente que pidió mi inclusión en el once titular, aparte soy hincha de San José desde mi niñez", dijo Jesús.
Al terminar el partido, las lágrimas eran incontenibles, esa imagen se hizo viral en cuestión de horas e incluso el periódico "Marca" de España destacó la emoción del arquero orureño.
" No podía dejar de llorar, no podía calmarme, la gente gritaba Careaga, Careaga cuando me acerqué a saludar a mi papá", contó Jesús, quien había cumplido con la promesa que le hizo a su padre cuando era pequeño.
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