En definitiva fue uno de los cotejos más complicados para el cuadro de la "V" azul, el que se vivió anoche en el estadio "Jesús Bermúdez" que estuvo con un importante marco de público, alrededor de 20 mil almas estuvieron presentes en el "gigante del barrio Norte" vibrando con un encuentro digno de un clásico nacional.
El partido inició con una buena producción de conjunto del cuadro orureño, escondiendo el balón a los talentosos de Bolívar lo cual mermó el rendimiento colectivo de la visita, los "santos" ya tenían dos opciones claras de gol antes de los 10 minutos.
Un minuto más tarde, un centro bien ejecutado de Marcelo Gomes desde la esquina, Iker Hernández logra peinar casi sobre la línea desviando su dirección y Edemir Rodríguez ingresó desde atrás con un soberbio cabezazo para anotar el primero de la noche.
Hasta el minuto 20, el elenco orureño fue neto dominador de las acciones y tuvo las opciones para incrementar el score, pero una jugada demás o una resolución mal ejecutada impidieron esa situación.
De a poco, Bolívar fue saliendo de su letargo y en base a contragolpes llegó en una ocasión sobre la portería de Rodrigo Banegas que hasta ese momento tuvo una noche tranquila.
En una jugada por mitad del campo de juego, Jair Torrico recibe una falta de Erick Cano que el árbitro no cobra, el juvenil se va con el esférico hasta tres cuartos de cancha y con un pase preciso habilita a Juan Carlos Arce para anotar el empate transitorio al minuto 42.
En la segunda mitad del compromiso, César Vigevani, técnico de Bolívar, propició el ingresó de Hernán Rodríguez, Diego Bejarano y Luis Alberto Gutiérrez, en tanto que Miguel Ponce estratega del "santo" hizo ingresar a Freddy Abastoflor, Helmut Gutiérrez y Rodrigo Borda.
San José perdió la intensidad del primer tiempo y a momentos regaló el medio sector, lo cual benefició al plantel de la visita que pudo conseguir el segundo de la noche gracias a Vladimir Castellón al minuto 79, San José nunca bajó los brazos y por el contrario se fue en busca del empate, más con amor propio que con ideas, Bolívar tuvo que apelar a una línea de cinco defensas para tratar de evitar la caída de su pórtico.
Cuando todo parecía haberse consumado, llegó la jugada de tiro libre donde la defensa estuvo mal colocada y el español Iker Hernández con un remate magistral dejó sin chance al golero Moreira marcando el empate al minuto 90.
Todavía existiría una jugada más para ambos elencos pero ahí surgieron las figuras de los metas de cada equipo para dejar el marcador igualado a 2 goles por bando.
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