Con la posibilidad de que exista un pronto retorno del campeonato de fútbol en el país y que el mismo sea a puertas cerradas, los clubes tienen en frente un desafío bastante complicado, como subsistir en esta época sin uno de los ingresos más fundamentales para sus economías y al contrario erogando montos para cumplir con cada compromiso.
Este 5 de junio, la División Profesional del Fútbol Boliviano se reunirá para hablar sobre este tema y las fechas tentativas para retomar el campeonato, además de los protocolos de bioseguridad y el informe sobre los derechos de televisación de las gestiones 2021-2024.
Este panorama adverso también se presenta en el cuadro de San José, ya que, al margen de una crisis económica que hasta el momento no fue subsanada, ahora la institución de la "V" azul deberá pensar cómo afrontar un campeonato sin la presencia de su público, factor primordial en el tema de ingresos ya que el plantel orureño es considerado como el más taquillero del país.
Si bien es cierto que con el retorno del fútbol también habrá algunos ingresos por el tema de televisación, anteriormente se dijo que dichos montos están pignorados para saldar demandas interpuestas por ex jugadores y técnicos que pasaron por el cuadro de la "V" azul.
Desde el ente federativo se mencionó que, en caso de jugar sin público, por cada encuentro un club debe gastar entre 15 mil o 18 mil dólares, ya sea para la preparar la logística del partido, pago a los árbitros y alquiler del escenario, o caso contrario cubrir los gastos de pasajes y estadía en el caso de los cotejos como visitante, a esto se suma el pago de salarios a jugadores, cuerpo técnico y otros.
Es por ello que en San José se tiene en mente el proyecto de captación masiva de socios como una alternativa de solventar al club en este tiempo de fútbol sin público, propuesta que en pasados años fue planteada por la masa societaria, pero sin resultados positivos.
En este año, el grupo de hinchas tomo la iniciativa y presentó un proyecto de captación masiva de socios el pasado 29 de abril, donde se pone como base una cantidad de 30 mil socios para mantener la estabilidad de la institución.
Sin embargo, las diferencias entre hinchas provocó que una facción de ellos se divida y forme una nueva organización, misma que en colaboración con la dirigencia presentó un nuevo proyecto de captación de socios con el fin de tener un aproximado de 10 mil nuevos afiliados con una inscripción de 100 bolivianos, de darse esto el club recaudaría un monto aproximado de un millón de bolivianos.
Si bien ambas propuestas son interesantes, lo negativo es que la división que existe en el club es uno de los factores para no encaminar el proyecto de la mejor forma, esto se relaciona en que existe un grupo que apoya a la dirigencia de Huáscar Antezana y otra que pide elecciones claras a través de un nuevo estatuto para dar legalidad y legitimidad a la institución.
INVERSORES
Otro de los planteamientos para salvar a San José de la crisis, era el de buscar un grupo inversor para que pueda inyectar recursos frescos a la institución y subsanar el tema de deudas y poder encaminar proyectos para que el plantel orureño esté siempre en la palestra de los torneos internacionales.
Sin Embargo, el tema de división fue nuevamente el punto discordante para que este proyecto tampoco avance, existen de momento dos propuestas las cuales se quedaron estancadas precisamente por la división interna que existe en el cuadro de San José en distintos niveles.
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