Promesa cumplida. Nery Quintana volvió a Oruro para seguir alegrándole la vida a Rodrigo Canaviri Fernández, de 13 años, un niño humilde y talentoso al que conoció la semana pasada cuando fue a dar un curso a los arqueros del plantel de San José.
En esa ocasión, Quintana de manera espontánea invitó a Rodrigo a que deje el cesto con bolos y demuestre lo que sabe en el arco. Grande fue su sorpresa cuando vio que el pequeño, que calzaba abarcas, demostró talento pese a su edad y su falta de formación.
Este hecho fue filmado por miembros del equipo de Quintana, pero como fue un gesto bonito se hizo viral porque el DT de arqueros lo transmitió al vivo desde su página del Facebook.
Esta corta experiencia provocó que muchos medios de comunicación de alcance nacional inviten al entrenador para que hable de este suceso deportivo.
Fue así que Quintana retornó este lunes a Oruro. No lo hizo con las manos vacías. Llevó un equipaje de ropa deportiva para Rodrigo, a los que se sumó un nuevo celular y recursos económicos que donaron amigos del DT, como es el caso del lateral de Bolívar Diego Bejarano y Julio Salinas, que radica en Estados Unidos.
Rodrigo y su familia son potosinos, pero viven transitoriamente en Oruro. Se vino con sus padres para buscar días mejores en la capital de El Pagador. En su tiempo libre vende bolos y admite que su sueño es ser arquero del plantel profesional del equipo santo.
“Esto no lo hago por mí. Es por este niño talentoso y que necesita apoyo para que salga adelante. Es Dios el que me utiliza para hacer el bien porque él cambió mi vida de mil maneras”, dijo Quintana, que forma porteros y que ha trabajado en varios clubes del país.
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