Si bien el club San José tiene dos dirigencias que van luchando palmo a palmo para ser reconocidos por la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), esto solo se lo realiza en la lírica y los papeles ya que en los hechos el “santo” tiene un equipo olvidado, incluso no existe recursos ni para las aguas y el refrigerio, además que esta dejadez obliga al cuerpo técnico a suspender partidos amistosos ya que simplemente no existe algún dirigente que los visite desde hace más de una semana.
La situación del primer plantel de San José es bastante crítica y sin que nadie salga al frente para hacer frente a las múltiples necesidades de los jugadores que a pesar de no tener contrato y no estar asegurado su futuro en el club, siguen dando el hombro a la entidad y entrenando conscientemente a la espera de que algún dirigente pueda aproximarse al complejo y conversar con ellos.
Desde que se jugó el amistoso con Nacional Potosí, ni la presidente elegida por aclamación Patricia Flores ni mucho menos David Rivero, elegido en elecciones el 3 de enero, han llegado al complejo para solucionar algunos temas puntuales en el mantenimiento del complejo o la dotación de condiciones mínimas a los jugadores para el entrenamiento diario.
Si bien el grupo de hinchas Santos Orureños por Siempre (SOS) estuvo coadyuvando con la entrega de refrigerios a los muchachos de la Sub-19 y el equipo principal, esto también ya culminó y tuvieron que ser algunos de los jugadores como Kristof Henningsson quien ponga los pesos para colaborar con algo de agua y algún refrigerio para los futbolistas.
El técnico Domingo Sánchez también coloca parte de sus recursos para solventar algunos gastos urgentes del primer plantel y lamentó que hasta el momento ninguna de las dos directivas se apersone por el complejo para ver estas necesidades básicas.
Lo más preocupante es que hasta la fecha no se pudo subsanar el tema de contratos y ya se llegará a los dos meses de esta gestión sin que se paguen salarios o se hagan contrataciones con futbolistas que también tienen familia y tienen que gastar de su bolsillo para continuar con los entrenamientos sin que se tenga ningún tipo de remuneración y peor aún la garantía de que serán contratados por el club, algo que llena de incertidumbre.
Sánchez mencionó que la situación ya es insostenible porque se está afectando el trabajo del primer plantel y el cronograma establecido, por ejemplo para este fin de semana se tenía previsto cumplir con un cotejo amistoso, pero el mismo tuvo que ser suspendido porque no se tiene recursos para asumir la parte logística, lo propio pasa con el partido pactado con Independiente Petrolero cuyo encuentro estaba previsto para el 21 de febrero, además de un campeonato cuadrangular en Cochabamba que no se va poder cumplir porque no existe montos económicos para solventar el viaje.
Bajo ese panorama Domingo Sánchez y sus dirigidos continúan con el trabajo correspondiente a la espera de soluciones en el ámbito dirigencial.
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