Acorralado por las deudas y, sin un equipo competitivo que haga pie en el torneo y con múltiples sanciones que van llegando día a día, San José pareciera ser que vive una “crónica de una muerte anunciada”. En la víspera, el Tribunal Superior de Apelaciones (TSA) emitió una nueva resolución en la cual sanciona con la quita de 3 nuevas unidades por las deudas pendientes con los jugadores Rodrigo Vargas, Iván Vidaurre y Ronald Segovia.
La resolución emitida por el TSA fechada con el 26 de julio de este año, da cuenta que en concordancia con el artículo 90 del Código Disciplinario de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) es la instancia que debe aplicar las sanciones de las resoluciones del Tribunal de Resolución de Disputas (TRD) y su conminatoria ante el Comité Ejecutivo de la FBF para su correspondiente aplicación.
En ese sentido se explica que en fecha 8 de julio llegó a esta instancia la conminatoria de pago por incumplimiento a la resolución 53/21 en favor de Rodrigo Vargas, del mismo modo llegó otra conminatoria fechada con el 7 y 17 de junio en favor de Ronald Segovia, finalmente también se tiene otra conminatoria del 7 de junio por incumplimiento a resoluciones en favor de Iván Vidaurre.
“El Tribunal Superior de Apelaciones de la FBF, de conformidad a lo dispuesto por el artículo 90 del Código Disciplinario de la FBF, Sanciona al club San José con la pérdida de tres (3) puntos de la tabla valorativa del campeonato en disputa, por falta de pago a los jugadores Rodrigo Vargas Touchard, Ronald Segovia Calzadilla, Iván Vidaurre Mejía, debiendo notificarse a la División Profesional y a la FBF a efecto de dar cumplimiento con la presente determinación”, señala la parte principal del documento.
Bajo estas circunstancias el panorama del cuadro de la “V” azulada es lapidaria, ya que ahora está con menos 12 unidades y con las horas contadas puesto que estas conminatorias de pago tienen una segunda y tercera instancia y no hay quien pueda dar solución a las mismas, por lo que más temprano que tarde San José descenderá por estas demandas.
Hasta el momento ni la dirigencia del cuadro “santo” ni el Tribunal de Honor se han pronunciado sobre esta dura realidad que atraviesa el elenco orureño que se ve acorralado por todos los frentes y sin ningún tipo de solución a sus problemas porque el tiempo también se ha convertido en otro enemigo.
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