La buena voluntad de los jugadores, sumada a la intervención del Tribunal de Honor y nuevas promesas por cumplirse, fueron el factor para que los futbolistas desistan su pedido de cumplir con el compromiso firmado por Sebastián Bueno y volver a los entrenamientos con miras a jugar el cotejo contra Aurora en el reinicio del torneo Único de la División Profesional.
La reunión efectuada en los camarines del complejo “Húngaros del 55” duró algo más de una hora, donde solo se tuvo la intervención de los miembros del Tribunal de Honor y los jugadores del primer plantel, los dirigentes del club solo se quedaron en las afueras del complejo sin poder dar solución a los múltiples problemas del “santo”.
Del encuentro entre jugadores y representantes de los socios, salió “humo blanco” y los futbolistas decidieron seguir apoyando al club, dejando de lado el pedido de pago de salarios devengados, aunque eso conlleve otra crisis interna que ellos viven, ya que varios no cobraron desde gestiones pasadas sumado a los seis meses de este año.
Los jugadores señalaron que seguirán al frente del club por decisión personal, ya que de lo contrario el equipo corre el riesgo de descender, a su vez pidieron a socios e hinchas que dejen de lado las críticas y la demagogia, y que de una vez por todas asuman determinaciones claras para salvar al club de la inminente desaparición.
El accionar del Tribunal de Honor en un momento crítico demuestra que la dirigencia perdió todo poder de credibilidad y de solución a los conflictos más mínimos que se tienen en el club, sin embargo el presidente del ente representativo de la masa societaria, Ernesto Aranibar, aclaró que no se trata de destronar a nadie ni de quitar funciones a quienes aún continúan llevando adelante la administración de la entidad, pero que es hora de tomar acciones más concretas para brindarle un último “tubo de oxígeno” al club y tratar de sacarlo del estado de coma en el que se encuentra.
Ello dependerá mucho de la voluntad de socios, hinchas, autoridades y toda la población de Oruro que debe despertar de una vez y buscar soluciones creativas a los problemas del club de forma unida y mirando un solo horizonte, algo que deberá patentarse en la asamblea de socios, prevista para esta tarde desde las 17:00 horas a efectuarse en el anfiteatro de la facultad de Economía.
Tras la reunión los jugadores volvieron a las prácticas, al mando de Domingo Sánchez que por fin, luego de siete meses, tendrá su debut soñado como estratega del cuadro de la “V” azul, si bien no se dará en las condiciones ideales y como él lo habría soñado, pero adelantó que pondrá todo de sí para buscar el mejor elemento y motivar de la mejor manera a los muchachos para que se tenga una representación digna en Cochabamba.
Los jugadores también toman este reinicio del torneo como una revancha personal, con las ganas de hacer bien las cosas y dejar el alma en la cancha para buscar un triunfo que motive al hincha y vea que nada está perdido y que desde el fondo el “santo” de los milagros puede resurgir para volverse a colocar en el lugar de privilegio que merece.
El equipo viajará a la “llajta” este viernes en dos buses que fueron gentilmente proporcionados por algunos hinchas que con acciones demuestran cómo es la forma de apoyar al cuadro orureño.
YA NO VAN
Como se anticipó, al no existir solución a los problemas económicos y las demandas ante FIFA, una más de las promesas incumplidas de Silvio Fontana y compañía, los jugadores que llegaron a prueba, tuvieron que retirarse sin pena ni gloria y con algunas deudas en tema de estadía, es el caso de Cristian Díaz, quien junto a otros jugadores como Augusto Seimandi, Alan Rodríguez y Walter Sejas, que aguardaron hasta el último momento para ver una mínima posibilidad de quedarse en el club que se esfumó con los problemas que se fueron sumando en esta semana, de manera que decidieron marcharse.
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