El club San José solicitará a la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) que el plazo de habilitación de jugadores, que fenece este martes 31 de marzo, sea ampliado al menos un mes más, por la coyuntura actual que se vive en el país.
“Hay dirigentes de otros clubes quienes también tienen ese pensamiento de que el libro de pases debe seguir abierto, porque con la cuarentena todo se paralizó y muchos equipos queremos habilitar jugadores”, aseguró Huáscar Antezana, presidente de San José.
Su club tiene varios futbolistas en la lista: Aldo Velasco, Ronaldo Monteiro, Pablo Vaca, Percy Gil y otros más.
Sin embargo, San José está impedido por la FIFA de efectuar habilitaciones por deudas salariales con el técnico peruano Julio César Uribe y el jugador argentino Nahuel Quiroga, aunque prevé superarlos “pronto”.
“Al profesor Uribe se le pagó una parte y queda otra que se le cumplirá, entonces él retirará la demanda. Estamos trabajando para sacar adelante al club. Nos estamos desviviendo por buscar apoyo de todo lado”, explicó el dirigente.
Antezana añadió que realiza gestiones a diferentes niveles para conseguir recursos, una de ellas ante la Gobernación de Oruro, donde tuvo “buena respuesta” del gobernador Zenón Pizarro.
“El propósito es que mediante las facturas de agua y luz se aporte un boliviano al club por cada factura. Ojalá podamos sacar la resolución para que todo sea legal”, sostuvo.
Explicó que para ello ha comenzado el llenado de libros con las firmas de los hinchas haciendo esa solicitud.
“El gobernador tiene toda la intención de ayudarnos, es hincha del club, pero tiene limitaciones y debe apoyarse en la parte legal, para ello debemos presentar al menos 20 libros con miles de firmas”, según Antezana.
Con relación a la situación del entrenador argentino Omar Asad, Antezana consideró que el DT no tuvo predisposición de solucionar el tema económico y que su regreso al club es complejo.
“Se le hizo una propuesta económica tomando en cuenta la realidad del club, pero no quiso y se fue. Además tenemos conocimiento de una intimación de deuda que habría presentado, aunque en otro contacto con él, está dispuesto a regresar si se le paga todo”.
También se adeuda los salarios de la actual plantilla. “Nosotros pagamos porcentajes iniciales, ojalá en abril volvamos todos a trabajar y les completaremos el resto del primer sueldo. Hubo malos manejos y decisiones del pasado que perjudican ahora al club”, explicó.
El capitán Mario Ovando, uno de los jugadores antiguos del club, dijo que el actual presidente no cumplió casi en nada lo acordado y le perdieron confianza.
“Sabe que el plantel está enojado con él porque no cumplió lo que nos dijo, ni en sueldos ni en otras promesas. Nos mintió y eso no lo podemos ocultar”, explicó.
El volante brasileño naturalizado boliviano Marcelo Gomes, dijo que la deuda no solo son los sueldos de este año, sino otros del año pasado, más premios.
“Él llegó al club y no cumplió los compromisos. Nosotros sí lo hicimos por el amor a la gente, eso vino de cada uno, por eso sin entrenar logramos resultados positivos, pero ya no podemos seguir así, porque es un club profesional y los únicos que damos la cara en estas circunstancias somos nosotros”.
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