El plantel de San José reanudará su trabajo de pretemporada de forma presencial recién desde el próximo martes, esto obedeciendo las restricciones que se tiene en el municipio de Oruro, si bien el trabajo vía virtual es una alternativa, el cuerpo técnico espera que ya no se tengan más interrupciones en el entrenamiento, ya que el tiempo de preparación del plantel con miras al reinicio del certamen es cada vez más corto.
De no darse ninguna sorpresa con la Selección boliviana en la Copa América, el reinicio del Campeonato Único de la División Profesional se podría dar en la primera semana de julio próximo, algo que sin duda afecta al cuadro de San José, particularmente a los directivos, quienes deberán subsanar los problemas ante FIFA y también la preparación de un equipo compacto con varios cambios como ellos mismos se comprometieron, para mejorar en el campeonato.
Sin duda que son dos retos importantes tanto para el cuerpo técnico del plantel de la “V” azul, como para la dirigencia que se puso como plazo máximo para la solución de los problemas hasta el 10 de julio, algo que parece complicado, debido a que se sumaron los casos por resolver y los directivos no dan señales de marchar por buen camino, solo se limitan a brindar declaraciones en las redes sociales.
Para el entrenador Domingo Sánchez, las dos últimas semanas fueron para el olvido, principalmente porque no pudo desarrollar el trabajo planificado, un ejemplo claro de esto es que hasta la pasada semana ya debía presentar una lista tentativa de algunos jugadores que llegaron en calidad de prueba y que tienen el potencial para quedarse en el equipo principal.
A esto se sumó el paro declarado por los jugadores del primer plantel, quienes buscaban el pago de salarios de los más de cinco meses que se les adeuda, compromiso que al final la dirigencia no pudo cumplir y este tema fue subsanado de otra forma, con la incursión de hinchas del club y con una directiva que quedó mal parada por esta situación, lo propio que los jugadores quienes al margen de ganarse críticas de parte de los aficionados, no consiguieron su objetivo y al final terminaron aceptando la propuesta de ser pagados hasta antes del reinicio del torneo.
En resumen, el único perjudicado de este entuerto fue el cuerpo técnico (a pesar que sabían dónde se estaban metiendo) que comenzó la semana con el trabajo físico en los arenales, algo que no sirve por la falta de continuidad, motivo por el cual en esta semana se espera que no haya mayores novedades y el trabajo se cumpla de forma regular para buscar el equipo que queda afrontar lo que resta del campeonato.
Pero al margen de estos problemas internos, el técnico del equipo tiene que lidiar también con las restricciones que continúan en el municipio, por ejemplo, hoy no se podrá entrenar debido al encapsulamiento por el feriado, Domingo Sánchez deberá sacarle tiempo al tiempo ya tendrá que preparar un equipo compacto que pueda cambiar el panorama del torneo y volver a enamorar al aficionado.
El otro problema que tiene Sánchez es la incertidumbre de no saber si habrá solución en las habilitaciones, por lo que solo se debe esperar los resultados de la dirigencia y confiar en las pablaras de Silvio Fontana y compañía que en reiteradas ocasiones señalaron que de por medio está el prestigio de cada uno de los directivos y que la fecha límite del 10 de julio sigue vigente para subsanar los casos ante FIFA para habilitar jugadores, algo que más allá de la llegada o no de los refuerzos, será una victoria para los directivos ante sus detractores que día que pasa se van sumando.
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